3 hoteles para ofrecer a tus clientes si quieren visitar los Castillos de la Loire

La región de los castillos del Loira engloba un conjunto de hasta 71 lugares históricos, incluyendo algunas abadías y basílicas. Pero básicamente castillos encaramados, o en mitad de los cursos medio y bajo del río Loira en su camino al Atlántico. El origen de estos castillos de Francia es casi siempre medieval, como aprecian los visitantes en las impresionantes estructuras defensivas. Pero datando casi todos entre los siglos XV y XVI, estas fortalezas eran más bien mansiones señoriales, ya que este río era el eje del poder real francés en la época.

 

Hoy se trata de una región unificada turísticamente mediante la Oficina de Turismo Francés y la asociación Castillos del Loira, Valle de los Reyes, y cuenta con una amplia e interesantísima oferta hotelera y de restauración.

 

Desde Jumbobeds te recomendamos tres de esos hoteles para ofrecer a tus clientes que quieran visitar esta zona.

 

Hotel Le Choiseul – Amboise (4*)

 

El Hotel Le Choiseul es un castillo, del siglo XVIII, pero castillo a fin de cuentas, y en las mismas orillas del Loira en la localidad de Amboise, a pocos pasos de su castillo medieval.

 

Su ubicación privilegiada lo convierte en referencia: es central para visitar otros castillos reales como el de Chenonceaux, Chambord o Blois, entre otros. También está en mitad del trazado del “Loira en bicicleta”, ideal para aquellos que quieran hacer la ruta pedaleando. Además, desde Amboise hasta Chenonceaux se extiende una hermosa región vinícola que completará cualquier excursión.

 

Destacando por sus servicios, en Le Choiseul cocina el chef Mickaël Renard ofreciendo menús de primera categoría con una cocina fusión que mezcla las innovaciones con los ingredientes y recetas más tradicionales.

 

Hotel Escale Oceania – Orleans (3*)

 

Ubicado a orillas del Loira en pleno centro de Orleans, el hotel Escale Oceania (del grupo Oceania) ofrece una perspectiva diferente para el viajero que busca hoteles modernos en zonas históricas. Este tres estrellas está complemente reformado y remodelado, y es una base de operaciones perfecta para visitar los castillos empezando por Meung-sur-Loire, Chamerolles o Beaugency.

 

Aunque la propia ciudad de Orleans, con su poderosa historia asociada para siempre a Juana de Arco, bien merece una visita a fondo.

 

Este hotel cuenta además con servicios adicionales como admisión de mascotas, y sala de juegos para niños, lo que lo hace perfecto para familias.

 

Hotel Kyriad – Tours, St. Pierre des Corps (3*)

 

A cinco minutos en coche o tren de la capital de la región, Tours, el hotel Kyriad es la opción perfecta para visitar los castillos de curso medio del Loira, además de otros viñedos de la zona a orillas del río como son Vouvray o Montlouis sur Loire.

 

La ciudad de Tours es de por sí un centro turístico que nadie puede perderse. Protagonista de acontecimientos históricos y madre de personajes esenciales en la historia francesa (como San Martín de Tours), la ciudad y sus monumentos, como el castillo o la catedral de San Gaciano son un imperdible en la visita de la región.

 

Además de ofrecer servicios para visitantes particulares, el hotel Kyriad es también muy adecuado para convenciones o seminarios gracias a sus amplias instalaciones, adaptables a muchas necesidades, con un teatro en el que pueden caber hasta 125 personas.

 

Hay que destacar también el restaurante del hotel, la Brasserie Le Parvis, que sólo abre de lunes a viernes, pero permite degustar no sólo buena cocina francesa, sino también una gran selección de cervezas nacionales y de importación.

 

Estos tres hoteles ofrecen una relación calidad-precio más que interesante, con una completa carta de servicios, y una ubicación ideal para descubrir el corazón del valle del Loira, sus ciudades, sus gentes… y por supuesto sus castillos.

 

La gastronomía y la enología son los dos sectores que completan la experiencia del visitante, por lo que además de la restauración de cada hotel, será muy interesante que le ofrezcas a tus clientes algunas recomendaciones sobre restaurantes o vinotecas donde se pueda disfrutar del sabor y la fuerza del producto de la tierra.

 

Y es que para conocer a fondo un país no basta con ver sus monumentos y aprender su historia: ¡hay que saborearlos también!